Fernando Molano, Circa, 1996

domingo, 14 de octubre de 2012

Petición

  Si ustedes lo permiten, yo quisiera declarar que
he cruzado por la vida. Y aún me queda.

 A veces temo que los hombres seamos sólo una raza
de náufragos perversos, y no exista en la isla el verdadero
amor, como no sea el propio (o el de los dos, a lo sumo).

 Aún así, a mi la vida me seduce, y siempre aguardo
a que en cualquier esquina me asalte la bondad de
algún extraño.

 De mi fragilidad ya ha sacado su provecho este
mundo en que he nacido: no creo amarlo mucho.
Pero adoro sus utopías, en especial las que han muerto,
y no he dejado de soñar el día en que triunfe alguna
revolución de hombres buenos, y pudiera en ella sentirme a gusto,
aun cuando nadie me ame y yo esté solo.

 Pero ocurre que ya me deja el tiempo, como a un
pasajero olvidado en esta pobre estación que es mi casa y mi país.
Y quisiera, al fin y al cabo, si ustedes lo permiten, preguntar:
¿No sería posible, en lo que queda, sin que hacia afuera
me sigan empujando, ocupar algún lugar en el recinto?

-Bien: puede ya reír el auditorio.